Sin cotizar al IMSS o al ISSSTE
Cualquier persona puede abrir una cuenta de ahorro para el retiro en una afore; obtendrá buenos rendimientos y puede deducir sus aportaciones.
Ser doctor, abogado, escritor, electricista o desempeñar cualquier actividad profesional u oficio de forma independiente, no es una limitante para poder gozar de una pensión cuando llegue a la edad de su retiro.
Mientras más pronto comience a conformar un ahorro, mejor. No herede a sus hijos la responsabilidad de financiar su retiro ni planeé seguir trabajando a los 70 años como si tuviera 40.
Una de las desventajas de ser independiente es la falta de prestaciones, entre las que se encuentran las del retiro; sin embargo, desde el 2005, todos los trabajadores que comiencen a prever su jubilación pueden hacerlo aun cuando no coticen al IMSS o al ISSSTE.
AFORES PARA INDIES
Abrir una cuenta individual en una administradora de fondos para el retiro (afore) es gratuito y ya no es un requisito estar afiliado a alguna institución de seguridad social.
Las afores son las instituciones encargadas de administrar e invertir los recursos de los trabajadores cuyos fondos se les entregan cuando cumplen los 65 años.
Aunque hoy el número de cuentas independientes es bajo con respecto al número total (192,626 cuentas de un total de 41, 947, 057), se ha registrado un aumento de 64% en el último año, según datos de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar).
De las 15 afores registradas ante el organismo son siete las que ofrecen el servicio de administración de recursos para trabajadores independientes: Afirme Bajío, Banamex, Bancomer, Banorte Generali, Coppel, MetLife y Profuturo GNP.
En el caso de los trabajadores asalariados, las aportaciones se hacen por parte del gobierno, el patrón y el trabajador. Para los que no tienen ese régimen, las aportaciones son completamente voluntarias, sin frecuencia ni montos mínimos.
Dado que “sus aportaciones son de carácter voluntario, el trabajador debe tener constancia, disciplina y la convicción de que ese ahorro tiene un propósito de retiro”, comentó Óscar Franco López Portillo, presidente de la Amafore.
RETIROS, LA TENTACIÓN
A diferencia de los asalariados -que pueden realizar retiros parciales por conceptos de matrimonio y desempleo, pero con límites de disposición- para los trabajadores independientes su saldo está disponible siempre.
“El concepto de retiro por desempleo o matrimonio no aplican para él, sus ahorros están disponibles en cualquier momento, aunque el desafío es no disponer de ellos sino hasta la edad del retiro. Es como comprar un fondo de inversión; sin embargo, en el caso de una afore, se tienen beneficios fiscales”, explicó el especialista de la Amafore.
Otra diferencia entre ambos regímenes es que las cuentas individuales de aportaciones voluntarias no cotizan al Infonavit, por lo que no genera derechos relacionados con crédito de vivienda.
BENEFICIOS DE SU JUBILACIÓN
Deduzca sus aportaciones
Depositar su dinero en una cuenta afore le conviene mucho más que dejarlo en una cuenta bancaria tradicional, pues a diferencia del ahorro puro su saldo se invierte y genera rendimientos, de esa forma su saldo se incrementa.
Según información de la Consar, el rendimiento histórico promedio del SAR se ubica en 6.17% (ya descotando la inflación) en los 13.5 años de operación del Sistema.
Lo que coloca a las siefores (instrumentos a través de los que invierten las afores) a la cabeza en rendimientos en comparación con otros instrumentos de ahorro, según un comparativo elaborado por la Condusef.
Además, la Ley del ISR contempla como deducciones personales todas las aportaciones complementarias de retiro.
Aunque usted puede ahorrar la cantidad que quiera para su retiro, el límite para la deducción será de 10% de sus ingresos anuales o cinco salarios mínimos anuales de su área geográfica, lo que sea menor.
REQUISITOS
Para efectuar este trámite, las instituciones recomiendan acudir personalmente a sus centros de atención con los siguientes documentos en original y copia:
Acta de nacimiento.
Clave Única de Registro de Población.
Identificación oficial: credencial del IFE, pasaporte, etcétera.
Comprobante de domicilio.
El mismo día puede concluirse el trámite y la institución le entregará una copia del contrato.
Para mayor información consulte la página web de cada afore, solicite orientación vía telefónica o por chat.
Artículo publicado en el periódico El Economista por Ilse Santa Rita. Pág 16.